Ella tiene unos ojos hermosos, la nariz pequeña y unas cuantas pecas en el rostro; es tan sexy que algunos pequeños puntos marrones oscuros forman parte de su cuerpo. Ella es en quien pienso a cualquier hora del día, al azar rodea y se adueña de mis pensamientos, así por así, como en estos momentos.
Ella tiene el cabello corto, un poco marrón y ondeado, cuerpo fijo y pesones de mujer adolescente. Ella cuando despierta a mi lado está toda desnuda que no puedo evitar acariciar sus pechos, sus muslos, su todo... Ella me gusta cuando a mi lado despierta porque con su mirada de amor ilumina mi día y eso es mi soporte.
Ella es quien hace más de 15 años comparte su vida con la mía. Ella está en base 3, pero su figura dice que tiene menos de 30. Tengo con ella dos hijas, pero cada vez que salimos solos me siento dichoso pues es como si fuera la primera vez que saliera conmigo.
Ella a veces es irritante, egoísta, insoportable, pero bella. Ella cuando se enfada, enmudece, pero cuando se ríe alegra todo y le sale la doncella. Ella a veces, por avatares de la vida hace su pataleta como niña; pero finalmente nos reconciliamos y terminamos riéndonos de la riña.
Se que ella es feliz cuando está a mi lado. Se que los momentos que pasó y pasa conmigo, para ella son irrepetibles e inigualables. Se que mi voz le alegra el día, que mi risa ilumina su corazón, y que a mi compañía le brinda tranquilidad y mis ocurrencias y anécdotas le llena de algarabía.
Ella es la mujer quien me acompaña en esta hermosa travesía. Ella es quien sabe de mis errores y guarda mis decepciones que por inmadurez le ocasioné. Ella, es ella quien me motiva a seguir aquí, quien confía y cree en mí y es la inspiradora principal para asumir los retos que enfrenté y que enfrentaré pero que a veces quiero dejar por temor al fracaso.
Ella sabe de mi frustración, de mis alegrías, mis logros pero también es quien me da fortaleza y me inspira para seguir luchando por un mundo mejor. Así como es buena inspiradora, es ella también quien guarda mis temores y mis preocupaciones.
Estos días, en que no estoy con ella, imagino que a cada noche espera mi regreso. Estoy seguro que le habla a la luna sobre sus sentimientos hacia mí y le confía que yo soy una pieza fundamental en su vida y en nuestro hogar. Las veces que la escucho por el teléfono algo tétrica, me pongo triste al pensar que ella está triste; en ese momento solo pienso en ver su rostro cuando finalmente logremos encontrarnos, de seguro su corazón se vestirá de alegría y se llenará de felicidad cuando me vea ingresando por nuestra puerta de metal, esa puerta en donde infinidades de veces nos besamos y acariciamos.
Quiero terminar este corto relato dedicado a ella, recordando un acto que tuvo conmigo y que marcó mi vida y que recordé al leer "BODAS DE PERLAS" de Mario Benedetti: "Una tarde ella vino hasta mi casa y tuvo un proceder no tradicional casi diría prohibido y antihigiénico que a mí me pareció conmovedor, besó mis labios tíficos y cuarteados conquistándome entonces para siempre ya que hasta ese momento no creía que ella fuese tan tierna inconsciente y osada" (1)
Esta canción siempre será para ella.
(1) BODAS DE PERLAS de Mario Benedetti (Extracto)
Comentarios
Publicar un comentario